miércoles, 17 de marzo de 2010

Campaña de Amnistía Internacional en favor de un suizo encarcelado en Libia


AI quiere que "miles de ciudadanos" envíen cartas urgentes a las autoridades libias para solicitar la liberación inmediata de Göldi.


Más de 14.000 personas firmaron en Suiza una petición para su liberalización, pero hasta la fecha no ha habido respuesta de las autoridades libias, por lo que la ONG ha decidido ampliar su acción.


Göldi cumple una pena de cuatro meses de prisión por presunta estancia ilegal en Libia, tras haber pasado más de 19 meses refugiado en la embajada suiza en Trípoli.


Su compañero de infortunio, Rachid Hamdani, fue absuelto de los mismos cargos y desde entonces se encuentra en Suiza, a donde llegó vía Túnez y tras recuperar su pasaporte confiscado.


En julio de 2008, Hanibal Gadafi, hijo del presidente libio, estaba en Ginebra con su esposa, quien debía dar a luz en esta ciudad, cuando fue detenido por la policía local durante dos días por la denuncia de dos de sus empleados domésticos que les acusaban de maltrato físico. La nuera del líder libio no fue arrestada, debido a su avanzado estado de gestación.


Ese incidente generó una escalada de la tensión y de las represalias políticas y económicas por parte del régimen de Gadafi, que incluyeron la prohibición a Hamdani y Göldi de abandonar Libia, tras lo cual ambos se refugiaron en la embajada suiza en Trípoli.


Desde allí participaron en sendos procesos judiciales por acusaciones de actividades económicas y estancia ilegales, de los que Hamdani fue declarado inocente, mientras que se dictó una pena de cuatro meses de cárcel contra Göldi.


Paralelamente, hoy se supo que el cantón de Ginebra habría asumido la responsabilidad de que se filtraran las fotos de Hannibal detenido, una carga que ha querido compartir con el diario que las publicó, "La Tribune de Genève".


La dirección del periódico se ha defendido argumentando que, simplemente, usaron el derecho a la publicación de una información relevante.


Preguntado sobre que se hayan asumido responsabilidades, el portavoz de AI, Manon Schick, señaló que es un paso positivo, pero advirtió de que debe "tomarse con prudencia". "Libia ha mostrado en el pasado que no sirve de mucho cumplir una de sus exigencias", agregó Schick.
Se espera que hoy las autoridades del cantón de Ginebra ofrezcan una rueda de prensa para aclarar su supuesta responsabilidad.


Por otra parte, se mantiene el pulso entre Libia y la Unión Europea tras la decisión de Trípoli de suspender de forma unilateral la concesión de visados a ciudadanos del área Schengen.


A mediados de febrero Libia decidió suspender la concesión de visados a los países que integran el espacio Schengen -la mayoría de los de la UE, más Noruega, Islandia y Suiza- debido al veto de entrada en el país helvético a más de un centenar de ciudadanos libios.


En esa "lista negra" figuraban el mandatario libio, miembros de su familia y los principales dirigentes civiles y militares del país magrebí como personas indeseables en Suiza.


La Confederación Helvética tomó la decisión de suspender los visados como método de presión hacia Trípoli, pero al hacer Libia exactamente lo mismo, pero a la inversa, es el régimen de Gadafi quien ahora presiona a la UE, a la que le pide incluso disculpas públicas por el comportamiento de Berna.

EFE

No hay comentarios:

Publicar un comentario